Más tarde o más temprano los chicos suelen empezar a pedir una mascota en el hogar. Si estás pasando por eso y tenés dudas, compartimos algunos consejos para tener en cuenta antes de traer un amiguito de cuatro patas a tu familia. Es innegable que la mayoría de los niños tienen un gran afecto por los animales. La presencia de un peludito propio puede influir positivamente en su desarrollo y crecimiento de diversas maneras. En nuestro país, aproximadamente el 78% de las personas tienen mascotas. Para los niños, estos animales no solo son compañeros, sino también un apoyo emocional en momentos difíciles. Además, desde cierta edad, las mascotas pueden ayudar a inculcar el sentido de responsabilidad y el compromiso con el cuidado. Estudios han demostrado que incluso en infancias con enfermedades crónicas o capacidades diferentes, las mascotas pueden jugar un papel crucial en su recuperación y mejorar su calidad de vida. La interacción de los chicos con mascotas domésticas, bajo supervisión
El frío puede impactar significativamente la salud de nuestras mascotas. Al igual que los humanos, los perros y gatos pueden sentir el cambio de clima y sufrir consecuencias si no están bien protegidos. Lo más importante para esta época invernal es aprender a detectar cuando nuestros bichis están manifestando una mantita sobre su cuerpo. Te compartimos algunas de las señales a las que tenés que prestar atención para reconocer el momento de poner al máximo la estufa y sacar las mantitas del armario. Señales de que tu bichi tiene frío Temblores: indican que tu mascota está intentando generar calor. Somnolencia y letargo: dormir más de lo usual puede ser un signo de desregulación de temperatura corporal. Respiración y movilidad lentas: la temperatura baja afecta su metabolismo y movilidad. Piel seca y entumecimiento: indican mala circulación y posible congelación. Cómo proteger a tus peluditos del frío Abrigo adecuado: usá ropa para mascotas y mantas. Paseos en horas cálidas: evitá salir